Madre soltera adoptó a una recién nacida que resultó ser hermana biológica de su otro hijo adoptivo.
Adoptar un hijo no es una decisión sencilla, sin embargo, es una gran oportunidad para todas las mujeres que sueñan con formar una familia, y para todos los pequeños que por razones externas a ellos, fueron abandonados por sus padres.
Katie Prince, soñaba con convertirse en madre, tristemente tras haberse separado de su esposo, recibió la noticia de que tenía problemas de fertilidad, lo cual dificultaba el que su sueño se volviera realidad.
Sin embargo, Katie no se dio por vencida y recurrió al método de adopción para poder darle a un pequeñito todo el amor que ella podía, y así fue como comenzó una nueva vida en Colorado.
En 2016 un hospital de la zona informó a Katie que habían recibido a un recién nacido y que era viable que ella lo adoptara. Cuando Katie lo tuvo entre sus brazos supo que debía cuidar de él y fue así como comenzó el proceso de adopción del pequeño a quien nombró Grayson.
A Katie le tomó alrededor de un año convertirse en madre legal de Grayson, pues la custodia seguía siendo de sus padres biológicos. Afortunadamente con el buen cuidado que había dado Katie a Grayson, el juez le otorgó la patria potestad formal y se convirtieron en una familia feliz.
Todo ocurría de maravilla en casa, y Katie comenzaba a pensar en la idea de adoptar a otro bebé. Fue ahí cuando nuevamente su vida cambió de inmediato.
Un día, Katie recibió una llamada del mismo hospital donde Grayson había sido abandonado; en esta llamada la trabajadora social le informó que una recién nacida había sido nuevamente abandonada en las instalaciones y que habían considerado que Katie cuidara de ella.
Katie no sabía qué hacer, pues la llamada fue muy inesperada, así que comenzó a llamar a sus familiares y amigos para que la orientaran. Sin embargo, dentro de ella sabía la respuesta, Katie quería adoptarla.
Un par de horas después, llegó a su casa Hannah a quien recibió con los brazos abiertos y con mucha ilusión. Al sostenerla ahí se percató de que su brazalete guardaba un secreto.
La pulsera indicaba el nombre de la madre biológica de la bebé, el cual coincidía con el de la madre biológica de Grayson. Katie se sorprendió muchísimo pues existía la posibilidad de que Hannah y Grayson fueran hermanos biológicos.
Katie quería conocer la verdad y se puso a buscar a la madre biológica de Hannah para saber más y cuando finalmente dio con ella pudo confirmar que aproximadamente hace un año, la mujer había dado a luz a un pequeño; haciendo que Grayson fuera el hermano mayor de Hannah.
Además de esto, Katie realizó un par de pruebas de ADN las cuales dieron positivo confirmando que los dos eran hermanos biológicos.
Hoy en día Katie agradece esa llamada, pues sabe que está ayudando a que dos hermanitos crezcan rodeados de amor y sobretodo a que crezcan juntos.
