Liz Kerslake estuvo casada con un hombre que la trataba mal y no dejaba insultarla por su sobrepeso. Así que Liz decidió dejarlo.
Mientras estuvo en su proceso de divorcio conoció a Nick, su actual esposo. Nick se enamoró de ella a pesar de que en ese momento Liz no estaba en su mejor momento. Él siempre la trató bien y nunca la insultó como su anterior esposo.
Quizá como recompensa para Nick y para trabajar más en su autoestima, Liz empezó una dieta y se enlistó en un programa para perdida de peso. Su determinación fue tan grande que adelgazó 10 tallas y pronto estaba pesando cerca de 60 kilos.
Liz tuvo una recaída cuando empezó a perder kilos y entonces empezó a engordar nuevamente, fue entonces cuando Nick le propuso matrimonio. Ella aceptó, ahí se decidió por fin a adelgazar de una vez por todas, con el fin de no lucir “Gorda y Fea” como el llamaba su primer esposo. en el día de su boda.
Ella regresó al régimen de alimentación que tenía y tras dos años de haberse casado con Nick ella sigue en forma. Reveló que Nick siempre la animó aún cuando ella se consideraba ‘fea’ y por eso ella siempre quiere verse increíble para el hombre que siempre la apoyó.
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